DeepSeek, ¿la primera piedra en el camino de Trump?
Francisco Jareño Cebrián, Universidad de Castilla-La Mancha
Si los primeros días de gobierno de Trump están sentando las bases de su legislatura, entonces esta se va a caracterizar por la mano dura contra los inmigrantes y el apoyo férreo a las criptomonedas y a las empresas tecnológicas, con inversiones millonarias en el desarrollo de la IA.
Tanto para conseguir sus objetivos en el tema de la inmigración como para aumentar el gasto en defensa de los países de la OTAN, Trump ha amenazado con la subida de aranceles, algo que complicaría el panorama del comercio mundial.
Ahora, ¿cómo puede cambiar este mismo panorama la irrupción de la inteligencia artificial china de bajo coste DeepSeek?
¿Qué es DeepSeek?
DeepSeek se ha convertido en la primera china con la que Trump tropieza en este segundo mandato. Y puede suponer el primer revés a sus aspiraciones de liderazgo de la IA en el mundo. La empresa emergente (startup) fundada en China en 2023 acaba de revolucionar el sector de la IA con la presentación de su DeepSeek-R1.
Este modelo ha demostrado ser altamente eficiente con escasos recursos: los resultados son comparables a los de sus competidores occidentales, como OpenAI, pero a un menor coste. Esa capacidad de operar a menor coste ha cuestionado la sostenibilidad de las inversiones multimillonarias en infraestructuras de IA y pone en entredicho Stargate, el millonario plan de inversiones en IA promovido por el equipo de Trump.
En cambio, DeepSeek ha sacudido el sector tecnológico estadounidense, provocando un descalabro en los valores de sus empresas y generando un terremoto económico y geopolítico.
Implicaciones económicas y guerra comercial
El éxito de DeepSeek tiene raíces en la geopolítica y el proteccionismo. Para proteger su industria tecnológica, Estados Unidos restringió la exportación de microchips avanzados a China.
En el mercado, las amenazas suponen oportunidades y el desafío que supuso para China desarrollar una IA sin poder acceder a los microchips estadounidenses finalmente se ha convertido en una ventaja competitiva difícil de superar. DeepSeek es la alternativa low cost a ChatGPT.
La aparente capacidad de ofrecer soluciones de alta calidad a bajo coste desafía la hegemonía tecnológica de Estados Unidos y pone en duda las grandes inversiones en hardware y energía de los modelos tradicionales. Se espera, pues, que se reevalúen las estrategias de inversión en el sector y que haya una mayor competencia en el desarrollo de IA.
Efecto DeepSeek en los valores tecnológicos
El lanzamiento de DeepSeek tuvo un impacto inmediato en los mercados bursátiles. Tras la presentación del modelo de IA chino, el valor de mercado de Nvidia, que hasta ahora había liderado el auge de la IA, perdió miles de millones de dólares en un solo día.
Este desplome se extendió a otras grandes tecnológicas, como Microsoft, Alphabet o Broadcom, que también sufrieron importantes caídas.
Golpe a los mercados globales
Las pérdidas no se limitaron solo a las empresas estadounidenses, sino que las bolsas de valores de todo el mundo experimentaron grandes retrocesos. En Japón, empresas como Advantest y Tokyo Electron vieron caer sus acciones en más del 10 %. En Estados Unidos, el índice de semiconductores de Filadelfia se desplomó un 9,2 %, su mayor caída porcentual desde marzo de 2020.
Estas caídas de los valores tecnológicos muestran que las bases sobre las que se ha asentado la IA (inversiones millonarias con una gran barrera de entrada) parecen no ser las únicas válidas.
El hecho de que una startup china haya sido capaz de desarrollar una IA de bajo coste, sin componentes que parecían esenciales y que son muy costosos, ha supuesto una disrupción total en el sector tecnológico.
Conclusión
DeepSeek marca un punto de inflexión en el sector tecnológico global. Su capacidad para ofrecer soluciones de IA eficientes y de bajo coste desafía el statu quo. De ahí las caídas de los valores tecnológicos.
En cuanto a las implicaciones económicas y geopolíticas, se intensifica la competencia entre China y Estados Unidos. Y el futuro de la IA y su impacto en la economía global sigue siendo incierto.
Francisco Jareño Cebrián, Catedrático de Universidad, Área de Economía Financiera, Departamento de Análisis Económico y Finanzas, Universidad de Castilla-La Mancha